Aunque las autoridades sanitarias trabajan para controlar la actual situación epidemiológica en la provincia de Ciego de Ávila, la autorresponsabilidad es clave para librar la batalla contra las arbovirosis, asegura José Luis López González, subdirector provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología.
El plan de enfrentamiento a estas enfermedades se centra en combatir el dengue y, a la vez, disminuir la presencia del virus o Fiebre del Oropouche, a pesar de ser transmitidas por mosquitos diferentes (Aedes aegypti en el caso del dengue; Culex y Culicoides en el caso del virus).
La situación se complica con el impacto de factores como las altas temperaturas que provocan el acortamiento del ciclo del Aedes, las lluvias, y el desorden medioambiental causado por los vertederos en los que existen aguas albañales estancadas y prolifera el Culex quinquefasciatus.
“Es importante acudir a las instituciones sanitarias ante la aparición de cualquier síntoma, pues se hace recurrente la llegada de personas con complicaciones por automedicarse o pasar tiempo sin consultar a un médico”, recalcó el especialista.
“Aún no existen vacunas para el dengue ni antivirales para la Fiebre del Oropouche, es por ello que el personal de la Salud es el mejor capacitado para manejar la medicación y aliviar los síntomas”.
Con respecto al dengue, explica López González que la vigilancia se refuerza en lugares donde hay mayor riesgo de transmisión de la enfermedad, como lo son Morón, el municipio cabecera y Venezuela. A ellos se suma Baraguá por aumentar su reactividad en las últimas semanas.
También precisó que se asocia al Oropouche el incremento de los casos del síndrome Guillain-Barré en la provincia y no siempre están vinculados.
Según las muestras analizadas, algunos pacientes sí se han contagiado del virus en días anteriores al padecimiento, pero otro gran grupo no mostró ninguna sintomatología.
Las acciones de control no solo se llevan a cabo con la población dentro de la ciudad, en el Aeropuerto Internacional Jardines del Rey y los hoteles de la cayería norte hay personal de la Salud que se encarga de la vigilancia clínica.
“Los extranjeros que permanecerán en la ciudad en casas de renta o de familiares están obligados a acudir a nuestras instituciones sanitarias con su carné de salud en un máximo de 72 horas”, afirma López González. De no ocurrir, las autoridades sanitarias pueden intervenir, multar, incluso acusar por propagación de epidemia a los ciudadanos.
Señaló, además, que la comunidad internacional en estos momentos está enfocada en detener la propagación de la viruela símica (mpox) y ya se encuentra activado el protocolo a seguir ante la aparición de algún viajero con lesiones en piel.
Tomado de Invasor