Parecía como si a la Empresa Agropecuaria La Cuba le fuera imposible levantarse y andar después de aquel resbalón —no precisamente con la cáscara de sus deliciosos platanitos—, cuando le arrebataron la fertilidad (rentabilidad) de su economía perseverante y triunfante durante más de medio siglo.
Aunque el traspié forma parte de la historia de una etapa infértil ajena a la voluntad de los bananeros, vale rememorar su impacto negativo para contrastar lo que se ha vivido en sus suelos rojos, casi en tiempo récord, con vistas a recuperar el liderazgo del colectivo para nada amilanado por huracanes, bloqueo, contingencias, crisis, pandemias, administraciones cambiantes y estrategias frustradas.
Mucho sí se habla de que, La Cuba necesita volver a consagrarse en la entrega de alimentos para todo el país, reclamo respaldado por la proeza laboral de los últimos meses, tras el cambio de la dirección administrativa, acciones organizativas potenciadas en la entidad, y el apoyo de las autoridades de la provincia y del Ministerio de la Agricultura.
Antes de la COVID-19 y el ordenamiento monetario del país, del polo productivo del municipio de Baraguá partían miles de toneladas de unos 20 productos agrícolas hacia todas las provincias y más de 250 instalaciones turísticas.
Uno de los líderes allí, Lázaro Morales Zamora, cuenta sobre reveses y cambios sustanciales: “La fuerza de trabajo emigraba hacia bases productivas privadas y, comenzó a cambiar el panorama cuando iniciamos un proceso de atención integral al personal; era impostergable recuperar valiosos recursos humanos vinculados directamente a los surcos.
“Priorizamos las reparaciones de viviendas, las ventas de alimentos a menores precios y los sistemas de pago que propiciaron el crecimiento del salario promedio mensual, de 4500.00 pesos a 13 700.00, cuantías superiores a estas devengan integrantes de los colectivos laborales agropecuarios, por ser un modelo de gestión devenido parte de la solución al problema agroalimentario”.
Una costumbre también volvió a retoñar. “A Ariel, el jefe nuestro, no le gustan los consejillos en la oficina, los hacemos en los campos de la zona de Tres Marías, en el sistema de riego por goteo Número Uno y otros frentes de la batalla diaria”, opinó Yunior Mompié de la Cruz, director de la Unidad Empresarial de Base de Cultivos Varios, la mayor de todas en La Cuba.
DONDE REINABA EL MARABÚ…
“Esto era un marabuzal hace unos meses, hoy nos preparamos para cortar los primeros racimos, que serán muchos”, enfatizó Mompié de la Cruz y apuntó hacia las plantaciones testigos de la parición múltiple de la tecnología conocida como plátano extradenso, introducida en el programa de siembra de la empresa a mediados del pasado año.
“Por supuesto, no solo de plátano vive el hombre, cosechamos frijoles en tres áreas donde recogimos, recientemente, 3000 quintales, y volvimos a sembrarlas”, alegó Mompié.
“Terminamos la recolección en las 27 hectáreas plantadas de papa con semilla nacional y comenzamos en las de simientes importadas, con alentadores resultados en la producción y los rendimientos por hectárea.
“Recuperamos las casas de cultivo y producimos dentro de ellas tomate, pepino, ají pimiento; en la actualidad están sembrados los suelos de las 18 instalaciones de este tipo y sus áreas aledañas.
En visita al centro laboral, Alfre Menéndez Pérez, gobernador, destacó: “La vida ha cambiado en el campo cubano con el déficit y el encarecimiento de los insumos, pero el colectivo de esta empresa, acostumbrado a altas cosechas de viandas y hortalizas, potencia los frijoles y el arroz; cría cerdos, carneros, gallinas para la producción de huevos y tiene el compromiso de introducir el pollo de ceba, con vistas al autoabastecimiento, porque aquí hay más de 1000 trabajadores que también necesitan alimentarse”.
EL ENSANCHAMIENTO DEL POLO
Además de las tradicionales hazañas de los asociados a las Cooperativas de Producción Agropecuaria Paquito González y Revolución de Octubre, el mayor polo productivo agrícola del territorio avileño —liderado por la empresa estatal La Cuba, símbolo del país— cuenta con los aportes y potencialidades de la Cooperativa de Crédito y Servicios (CCS) Máximo Gómez Báez, Vanguardia Nacional.
Damián Fernández Acosta, presidente de esa CCF, reconoce que “muy equivocado está quien no se compromete con hacer más por la alimentación del pueblo, no camine los campos e interactúe con los campesinos”.
El guajiro tiene afincados los pies en la tierra, que le agradece por tanta entrega a la tarea diaria. “En 2024 contratamos 3000 toneladas de productos agrícolas y aportamos más de 4000; subimos la parada a 15 000 en el compromiso para el presente año”.
Acerca de uno de los cultivos con la perspectiva de ser cada vez más potenciado allí, Julio Heriberto Gómez Casanova, primer secretario del Comité Provincial del Partido, subrayó: “La mayoría de la malanga que consumimos los avileños viene de otros lugares, por eso priorizamos un programa de siembra en los 10 municipios de la provincia”.
MÁS ALLÁ DE LOS RÉCORDS
Mayo, tal vez por ser el mes de la gran fiesta de la clase obrera, deberá pintarse de diversos colores no solo en calles y plazas avileñas, sino también por más presencia de plátanos en los mercados, fruto del esfuerzo de la rebelión de los bananeros durante un año de enfrentamiento a las adversidades.
Vista hace fe del embarazo potenciado de las plantaciones. Testigo fiel de ello es el ingeniero Ydael Pérez Brito, ministro de la Agricultura: “En Ciego saben producir y han hecho siempre algo que hemos perdido en nuestro sector, el especialista en cultivos. Una cosa es ser agrónomo y otra es ser platanero. Por eso, defiendo con el alma esta tecnología del plátano extradenso, que aporta mucho potasio, más comida para el pueblo”.
Aunque cifras de planes y reales no satisfacen la demanda, el guía de los protagonistas opina sobre lo que marca la diferencia: “Nuestro polo productivo tiene hoy 2200 hectáreas sembradas de forma total, queremos sobrepasar las 1200 de frijoles y romper los récords de producción de este grano y de un millón de quintales de viandas, hortalizas, granos y frutas”, enfatizó Ariel Nieves Concepción, director general de la Empresa Agropecuaria La Cuba.
Tomado de Invasor