“Tenemos el reto de que la gente esté clara de cuál es la causa principal de nuestros males, el bloqueo, sin obviar que estamos llamados a solucionar nuestras insuficiencias”.
Lo afirma la máxima autoridad política en la provincia, a solo unas horas de celebrarse el acto central nacional por el 26 de Julio
A punto de festejar lo que fue un propósito declarado mucho antes, luchar por la sede del acto central nacional con motivo del aniversario 72 del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, Julio Heriberto Gómez Casanova, primer secretario del Comité Provincial del Partido en Ciego de Ávila, responde solícito, a las interrogantes que le formula Invasor. En apenas una hora de ameno intercambio, describe un período de intenso trabajo. Al término del encuentro, el reportero “lleva a cuestas” unas 17 cuartillas las cuales, por razones de espacio, resume en estas líneas.
—¿Cómo asumieron las estructuras del territorio el propósito de luchar por la sede nacional, especialmente la organización partidista?
—Lo primero fue definir un sistema de trabajo que respondiera a las cuatro prioridades del Comité Central del Partido para el año actual, las cuales se relacionan con el fortalecimiento de la unidad, mediante una mayor participación popular en todas las tareas; el perfeccionamiento de la labor ideológica, teniendo en cuenta la avalancha mediática que cae sobre nuestro pueblo; la atención política a las proyecciones del Gobierno para desarrollar la economía y el enfrentamiento a las distorsiones, tendencias negativas, la corrupción e ilegalidades.
“Diseñamos un sistema de trabajo integrado del Partido en el cual participan el Gobierno, la Unión de Jóvenes Comunistas, las organizaciones de masas, las Fuerzas Armadas Revolucionarias, el Ministerio del Interior… El año pasado lo consultamos; lo hicimos de modo colectivo, pues yo creo que es la esencia también de estos resultados. Por supuesto, se prioriza cuanto tiene que ver con las principales preocupaciones del pueblo.
“A inicios de año, establecimos el movimiento político Ciego en 26. Más que lograr la sede de las actividades centrales, nos propusimos trabajar con la misma determinación de vencer con que se comportó la Generación del Centenario y, de esa manera, enfrentar la situación actual”.
—Se intensifica el control de procesos esenciales como la contratación de las producciones de todos los actores económicos. ¿Será en el presente año que se apreciarán impactos mayores, o restará un mayor período de tiempo para lograr incrementos sustanciales en la calidad de vida?
—En 2023 el promedio mensual de comercialización de productos agrícolas era de 1300 toneladas (t) y así también se comportó en el transcurso del primer trimestre de 2024. Esto se fue elevando en el segundo trimestre del pasado año. El control fundamental lo enfocamos en ampliar el área sembrada. De modo gradual, llegamos a una meseta productiva ascendente a unas 5000-6000 t mensuales. En momentos anteriores, un plátano estaba en 30.00 pesos dondequiera que tú lo ibas a buscar, meses en los cuales aquí se comercializaron 90 t. Gradualmente, viandas en las cuales aún no se ha logrado una estabilidad, bajaron de precio también y se experimenta una mejoría.
“Se dijo que en mayo debía darse una explosión productiva en La Cuba, pero no ha llovido. Los platanales allí no son ni una falacia ni una exageración estadística. A ello se une la complicada situación que enfrentamos con la corriente; en dos meses consecutivos, la disponibilidad de energía eléctrica era apenas de unas dos horas, pero los sistemas de riego por goteo necesitan como mínimo 16 horas continuas de electricidad. Hubo que demoler cultivos de maíz y plátano sin nacer. Hoy no es así, hay una atención diferenciada del país para esa empresa, en el sentido de proteger sus sistemas de riego.
“En las últimas semanas, en los mercados de Ciego de Ávila y Morón hemos tenido permanencia de plátano, relativa estabilidad de boniato, calabaza, maíz… En el resto de los municipios, se ha ido ampliando la distribución, pero no con la prioridad que han tenido Ciego de Ávila, Morón y Baraguá. Hemos logrado perdurabilidad de viandas como resultado de la gestión económica y productiva de la Empresa Agroindustrial Municipal en Bolivia. Otros territorios todavía están distantes, en Chambas tenemos carencias; en Florencia se ha mejorado, pero no se ha llegado al resultado esperado; Majagua ha retrocedido, el municipio de Venezuela se muestra estable. Lo principal es que cada territorio logre autoabastecerse.
“En un día comercializamos en la provincia 140,150, 180 t en ocasiones. No hay manera de falsear esta información, va contra factura, y que conste, aquí no estamos contando lo vendido en los timbiriches, a los puntos de venta, incluso a los puntos legales, pero no estatales.
“Hemos tenido una mejoría muy distante de las necesidades, en los próximos meses se aspira a una estabilidad en los surtidos”.
—¿Originales, creativos, en la actual conmemoración del 26?
—En otras etapas las acciones se correspondían con desarrollos específicos para los cuales existía disponibilidad de recursos. Ahora, nos enfocamos en las cuestiones que pueden tener un impacto en la población; por ejemplo, la venta de comida elaborada, bajo el principio de quienes como entidad puedan hacerlo, la elaboren y ofrezcan el servicio.
“Algunas empresas del sistema de la Agricultura producen 7000 panes diarios mediante encadenamientos con mipymes, a las cuales les compran la harina, elaboran el pan y, de acuerdo con la ficha de costo y la de venta, lo venden a un precio de 35.00 pesos.
“Estamos involucrados en un programa de siembra de ajonjolí y girasol con vistas a la entrega de aceite comestible a la población. Sumamos unas 600 hectáreas (ha) de estas oleaginosas y tenemos el propósito de llegar a las 2000 ha este año. Además, el propósito es dejar la cultura en los productores que en lo adelante asumirán este empeño y se crean las capacidades industriales necesarias.
“La acuicultura es un filón que nos puede aportar la proteína animal con mayor rapidez. Hemos activado los centros fundamentales de alevinaje. Por ejemplo, en el ubicado en La Teresa, el cual desde su creación no se utilizó con eficiencia, recuperamos, primero, 14 estanques con fuerzas de diferentes organismos y organizaciones; se acabó allí el marabú, los 14 están sembrados de alevines; y ahora recuperamos los otros 14 en ese lugar del municipio de Venezuela.
“El pasado año el país no pudo seguir importando el pienso para la producción de huevos que ya, de por sí, mostraba un deterioro. Se redujo a cero el alimento animal, fundamentalmente en los meses de septiembre y octubre, y las gallinas se fueron muriendo. Empezamos a formalizar convenios con los productores capaces de adquirir el pienso y formular la ficha de costo. El productor pone la comida, pero la entidad estatal genera y recoge la producción, es la que hace el manejo. Y entonces en una producción cooperada, una parte va al productor para la venta a la población, para reaprovisionarse también, y la otra parte se queda en la Empresa Avícola, para todo lo que tiene que ver con el consumo social.
“De 92 ha de piña que quedaban en la provincia, pasamos a 250 ha en el segundo semestre de 2024. Este año, también en igual período, pensamos marcar una diferencia a favor de la recuperación de las plantaciones y que eso repercuta en la mesa de los avileños”.
—¿En qué medida la vanguardia política está en sintonía con las transformaciones?
—El Partido no lo podemos ver como el Comité Provincial, sino como cada núcleo capaz de irradiar no solo hacia lo interno, en función de lograr en el colectivo donde se encuentra, en su área de influencia, un incremento de los niveles productivos y de la calidad de los servicios. Si nosotros aspiramos a tener un Partido más fuerte, debemos causar un impacto, ser más fuertes desde la base.
“Nos enfrentamos a retos desafiantes. Tenemos que denunciar el bloqueo y sus consecuencias, pero, al propio tiempo, lograr un grupo de cuestiones imprescindibles para la población, como la recuperación energética y el desarrollo de nuestro país”.
—Siempre tendremos quien se nos rezague, no asimile de inmediato las políticas, ¿cómo lograr que reaccionen?
—Ese es de los retos más difíciles. Desde los tiempos del Memorando de Lester Mallory se llama al desaliento, a la confusión, al descrédito, a la ridiculización de toda la institucionalidad de la Revolución. El enemigo lo ha seguido al pie de la letra, poniendo mucho dinero en función de lograr sus propósitos, y eso, sin duda alguna, ha tenido un impacto negativo, porque, si por un lado arrecian y tratan de asfixiar a nuestra economía, por el otro, generan toda una intoxicación mediática.
“Lo primero es que la gente nos vea trabajando y ese batallar se evidencie en resultados. Y lo otro es que nosotros estamos llamados a lograr un mayor debate con la base, a partir de una mayor capacidad de influencia de los cuadros para desmentir las campañas con las cuales se pretende manipular la conciencia, y para transmitir el mensaje de los principios y los valores defendidos por la Revolución.
“No hay tarea donde podamos decir ‘ya esto lo logramos del todo, ya lo vencimos’. En próximo semestre debemos darle continuidad al sistema de trabajo implementado, a todos los programas de la agricultura, que son ambiciosos; lograr un sistema de producción de pienso con materias primas endógenas, las cuales den pie al inicio de la recuperación de la producción de carne.
“Creo que, en esencia, debemos consolidar lo hecho hasta ahora, e incrementar y perfeccionar lo que sea perfeccionable”.
Tomado de Invasor