Vistiendo traje formal, como fue la constante durante casi todo el proceso electoral, Bernardo Arévalo de León, presidente electo de Guatemala, se comprometió la noche de este 20 de agosto a luchar contra la corrupción, cuando asuma la Presidencia de la República el 14 de enero de 2024.
Acompañado de su compañera de fórmula, Karin Herrera, ahora vicepresidenta electa, Arévalo ofreció una conferencia de prensa en un hotel capitalino, en donde calificó su victoria como un “basta ya de tanta corrupción”.
Arévalo de León de 64 años, sociólogo de profesión, e hijo del expresidente Juan José Arévalo Bermejo (1945-1951), agradeció a todos los guatemaltecos que salieron a votar y les dieron la victoria, la cual aceptaron con “mucha humildad”.
“Participar es un acto de defensa de la democracia y en este momento significó un acto de valentía”, refirió.
El mandatario virtualmente electo que, además, se convirtió en el más votado de la historia de Guatemala garantizó que harán un gobierno “para todos, sin distinción alguna” y que luchará por los derechos de quienes votaron y no lo hicieron por ellos.
“Vamos a hacer un gobierno que cuide a todas las personas, sin importar las diferencias y para garantizar que las instituciones se ganen su confianza”, añadió.
“Gracias pueblo de Guatemala. Este triunfo no es nuestro, es de ustedes que nos apoyaron a lo largo de este camino electoral. Esta victoria es del pueblo y ahora unidos, como pueblo, lucharemos contra la corrupción”, expresó el mandatario, cuya principal oferta de campaña fue la lucha contra la corrupción.
Añadió que la corrupción es un fenómeno que ha penetrado a la sociedad y ha cooptado los espacios, por lo cual, la tarea de su gobierno será “recuperar esos espacios”.
Al ser cuestionado por la ideología de su partido, respondió estar “absolutamente convencido de que no hay democracia sin justicia social, ni justicia social sin democracia” y que los pueblos deben ser dirigido por autoridades que resulten electas en procesos democráticos libres y abiertos.
Llamadas
Arévalo destacó que en las primeras horas después de consolidarse su victoria a través de los resultados preliminares, ya había recibido llamadas de tres mandatarios, uno de ellos Alejandro Giammattei con quien acordó comenzar el proceso de transición un día después de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) oficialice los resultados.
Además, también recibió llamadas de los presidente de El Salvador, Nayib Bukele, y de México, Andrés Manuel López Obrador, con quienes habló de la necesidad de trabajar en agendas comunes y explorar formas de colaboración de colaboración.
El obelisco
Asimismo, Arévalo destacó las celebraciones “espontáneas” de simpatizantes en el Obelisco y en la Plaza de la Constitución, las cuales —aseguró— no fueron convocadas por nadie. “No hay banderas del partido porque es una celebración del pueblo”, aseveró.
Aunque declinó asistir a alguno de estos lugares, anunció que en los próximos días se hará una convocatoria para celebrar la victoria.
Como muestra de su compromiso con la unidad nacional, resaltó que en su traje y en la indumentaria de Karin Herrera, ya no portaban el símbolo del Partido Semilla, sino la bandera de Guatemala.
Arévalo también habló de las posibles acciones que podría enfrentar el partido por parte de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci) que investiga a la agrupación por un supuesto caso de falsificación de firmas para constituirse como agrupación política.
Dijo esperar que la contundencia de la victoria sea suficiente para que cesen los intentos de descarrilar el proceso. “El pueblo ha hablado contundentemente, si no que le salgan a preguntar a quienes están afuera —celebrando—”, aseveró.
Vicepresidencia
Por aparte, la vicepresidenta electa indicó el resguardo de la integridad de las elecciones fue el resultado del compromiso de miles de guatemaltecos que integraron las juntas receptoras de votos y de los observadores nacionales e internacionales.
Aseguró que la Vicepresidencia a partir de enero de 2024 “se hará sentir” con el trabajo desde dependencias como la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología o la Secretaría contra la Violencia Sexual, Explotación y Trata de Personas – SVET.
(Tomado de Prensa Libre)