Si en los últimos días se ha extendido la percepción de que hay más tos y catarro circulando, ahora las estadísticas nos sacan de la zona de duda, al confirmar que la velocidad de transmisión de la COVID-19 va en ascenso y que coincide en tiempo y espacio con otras infecciones respiratorias agudas.

El dato preciso lo dio a Invasor José Luis López González, subdirector de Epidemiología en la provincia, quien ilustra que en los últimos 15 días se han reportado 14 casos de esta enfermedad, los cuales se corresponden en su mayoría con embarazadas, puérperas y niños menores de dos años; grupos de riesgo que se han mantenido en la mira de la vigilancia epidemiológica.

“Solo en la última semana fueron nueve casos, en contraste con los cinco registrados con anterioridad en igual lapso de tiempo, por eso, insistimos en el uso concienzudo del nasobuco en lugares públicos y de abstenerse de ir a trabajar o a la escuela con sintomatología respiratoria. Por estos días visitamos los controles de foco abiertos para garantizar la calidad de las acciones. El único alivio es que los pacientes evolucionan sin gravedad”.

Son los municipios de Ciego de Ávila, Primero de Enero, Bolivia y Morón los que presentan una mayor tasa de incidencia, la cual, por supuesto, no refleja a quienes han permanecido en casa sin test rápido o PCR de por medio, pero sí con la alarma de un malestar persistente, tos y fiebre.

A pesar de esto, López González aclara que, también, se han testeado a personas con síntomas respiratorios agudos o similares a los de esta enfermedad y han resultado positivas a determinados rinovirus y parainfluenza, o sea, los cuidados no están demás y cualquier indicio puede ser COVID-19 hasta que se demuestre lo contrario.

Llegados a este punto, avanzar en la aplicación de la tercera dosis de refuerzo en la provincia es el pilar sobre el que se afinca hoy el sistema de salud para sortear sin sustos esta nueva etapa. Así ha sido en parte, pues en los últimos tres meses no se reportan fallecidos por esta COVID-19 ni pacientes graves ni críticos en las salas de terapia intensiva, por lo que acudir a los puntos de vacunación establecidos en los policlínicos de cada área de salud es barrera ineludible de enfrentamiento al virus.

Hasta la fecha han recibido el refuerzo con Abdala y Soberana 02, combinación de probados efectos, más de 79 000 avileños entre los 19 y 69 años, alrededor de 18 000 con más de 70 años y cerca de 1900 gestantes. Aun cuando se cumple con las cifras potenciales exigidas, el ritmo es lento y ha faltado información oportuna.

Sobre la circulación de nuevas variantes no hay reportes en el territorio y, de existir, la preocupación hoy no es la gravedad de la sintomatología, sino la virulencia y la velocidad de propagación.

Ailén Castilla Padrón (Invasor)

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