La noticia de que los avileños merecieron la sede de las actividades centrales por el Día de la Rebeldía Nacional, en el aniversario 72 de aquel 26 de julio, revolucionó el ambiente en la ciudad de Morón, con una caravana de vehículos que circulaba con banderas y una alegre conga.

No fue óbice la falta de servicio eléctrico, para que las calles se iluminaran con un contagioso ambiente de júbilo, que movilizó a las familias las cuales se sumaron con aplausos al difundirse la noticia de ser sede de las actividades centrales por tan significativa efemérides.

Pese al adverso escenario actual, la representación del pueblo trabajador está presente en múltiples movilizaciones de apoyo a tareas agrícolas emergentes, y como logro resalta el destino turístico Jardines del Rey, enclavado en la jurisdicción territorial de Morón y definido entre los destacados de Cuba y el Caribe.

Al calor del movimiento político Ciego en 26, en Morón se acometen múltiples acciones en otros frentes, en los cuales resaltan sectores como Cultura, Educación, Salud y la activa participación de jóvenes estudiantes en movilizaciones.

La ciudad se reanima con jornadas de limpieza e higienización, inversiones en el sistema de acueducto y alcantarillado y restauración de reconocidos centros gastronómicos, por solo citar algunos ejemplos.

Morón despierta con las motivaciones que imprime la determinación de otorgar a Ciego de Ávila la sede de las actividades centrales del país por el 26 de julio. De fachadas de instituciones locales cuelgan banderas y otras alegorías propias de una celebración especial.

Tomado de Invasor

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