Cuba celebra, con masivas concentraciones y desfiles, el Día Internacional de los Trabajadores que, como es tradicional, en la isla caribeña constituye una fiesta del movimiento obrero nacional.
Con el fin de preservar los logros de la Revolución y apoyar la imperiosa necesidad de reactivar la economía nacional a través de la colaboración colectiva, en este 1ro de Mayo, la Isla vuelven a brillar con cada tribuna llena de carteles, estandartes y consignas que reflejan el compromiso y la determinación de aquellos que aman y construyen, de aquellos que no se rinden a pesar de las adversidades.
En cada desfile que embellece el horizonte de un extremo al otro del país, se unen en una amalgama con la clase trabajadora cubana amigos provenientes de otras partes del mundo, que suman sus voces a las nuestras en reclamo de justicia en contra del bloqueo criminal hacia la Mayor de las Antillas y del genocidio sionista que se lleva miles de vidas en Palestina.
En la Tribuna Antiimperialista de La Habana, miles de cubanos se congregaron para celebrar el Primero de Mayo, Día Internacional de los Trabajadores.
El acto cuentó con la presencia del General de Ejército Raúl Castro, líder de la Revolución, y Miguel Díaz-Canel, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República; el primer ministro, Manuel Marrero Cruz; el Comandante de la Revolución José Ramón Machado Ventura; el secretario de Organización del Comité Central del PCC, Roberto Morales Ojeda; el ministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla; el secretario general de la CTC, Ulises Guilarte, y otras autoridades.
Unos 200 000 cubanos representantes del gobierno, el Partido, la Unión de Jóvenes Comunistas, los CDR, las FAR, el Minint, la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana manifestaron su apoyo a la Revolución junto al malecón habanero. También se dieron cita más de 1 100 amigos de Cuba de 58 países y 220 organizaciones.
En las palabras centrales del acto, el secretario general de la CTC, Ulises Guilarte, afirmó que “millones de cubanos a lo largo y ancho de la geografía nacional demuestran una vez más que seguimos firmes y unidos en torno a nuestra gloriosa Revolución socialista, defendiendo sus ideales de independencia, soberanía y justicia social”.
Guilarte se refirió a los efectos del bloqueo económico en la sociedad cubana: «El recrudecimiento de la política estadounidense de máxima asfixia a nuestro pueblo, así como nuestras propias insuficiencias, configuran este escenario. Ello impacta negativamente en los niveles de consumo, la escasez de alimentos y medicinas, la pérdida del poder adquisitivo de los salarios y pensiones.
“Además, limita el acceso a insumos y materias primas destinados a nuestro plantel industrial, presiona a instituciones bancarias y compañías interesadas en el intercambio comercial y la inversión extranjera”.
Ante estas desafiantes circunstancias dedicaron la «fiesta del proletariado» a la heroicidad del pueblo cubano, aseveró.
El secretario general de la CTC dijo que existen buenas experiencias en todos los territorios del país que demuestran que es posible lograr la eficiencia productiva superando las limitaciones materiales y financieros.
Destacó que el capital humano es el recurso más seguro y sólido del país.
Señaló que el sector no estatal de la economía “nos exige mayor atención y protección a los derechos de los trabajadores”.
De acuerdo con Ulises Guilarte, “los trabajadores cubanos debemos ir a un control y fiscalización cada vez mayor de los recursos, así como a mantener un combate incesante a la corrupción, las indisciplinas e ilegalidades”.
En su discurso, declaró que el Día Internacional de los Trabajadores coincide con el mayor crimen cometido contra el pueblo palestino. “Cuba y su pueblo no permanecemos indiferentes ante estas graves violaciones”.
Tonado de Cubadebate